Ensalada asiática de pepino picante: Receta fácil y crujiente

¿Buscas un acompañamiento diferente, refrescante y con un punto picante? ¡Has llegado al sitio adecuado! Hoy te enseñamos a preparar una deliciosa ensalada asiática de pepino que sorprende tanto por su sabor como por su original presentación. Gracias a una técnica de corte especial, conseguimos que el pepino absorba mejor la vinagreta y tenga una textura única. Es ideal como aperitivo, guarnición o simplemente para darte un capricho ligero y sabroso.

Ingredientes necesarios

Antes de empezar, asegúrate de tener a mano los siguientes ingredientes. Las cantidades son orientativas, ¡siéntete libre de ajustarlas a tu gusto!

  • Pepinos: 2 unidades medianas (preferiblemente tipo holandés o similar, de piel fina)
  • Sal fina: 1 cucharadita
  • Salsa de Soja: 2 cucharadas soperas (si es baja en sodio, mejor)
  • Vinagre de Arroz: 1 cucharada sopera
  • Aceite de Chile: 1-2 cucharaditas (ajusta según tu tolerancia al picante)
  • Azúcar: 1 cucharadita
  • Aceite de Sésamo tostado: 1 cucharadita
  • Ajo: 1 diente pequeño, muy picado o prensado
  • Semillas de Sésamo tostadas: 1 cucharadita (y un poco más para decorar)
  • Cebolleta: La parte verde de 1 unidad, picada fina

Preparación paso a paso

La clave de esta ensalada reside en dos puntos: el corte del pepino y el equilibrio de la vinagreta. ¡Vamos allá!

1. El corte mágico del pepino

Este corte, a veces llamado acordeón, no solo es vistoso, sino que ayuda a que el pepino sea más flexible y se impregne bien del aliño.

  1. Lava bien los pepinos. Corta y descarta los extremos.
  2. Coloca un pepino entre dos palillos chinos (o mangos de cuchara finos) sobre una tabla de cortar. Esto actuará como tope para no cortar el pepino del todo.
  1. Con un cuchillo afilado, haz cortes finos en diagonal a lo largo de todo el pepino, llegando hasta los palillos.
  2. Dale la vuelta al pepino con cuidado.
  3. Ahora, haz cortes rectos (perpendiculares a la longitud del pepino), de nuevo finos y llegando hasta los palillos.
  4. Al levantarlo, verás que el pepino se estira como un acordeón. ¡Magia!
  5. Corta los pepinos por la mitad o en tercios para que sean más manejables al comer. Repite el proceso con el otro pepino.

2. Preparar el pepino

Este paso es fundamental para conseguir una textura crujiente y eliminar el exceso de agua.

  1. Coloca los trozos de pepino cortado en un bol.
  2. Añade la cucharadita de sal y masajea suavemente los pepinos con las manos para distribuirla bien.
  3. Deja reposar durante unos 5-10 minutos. Verás que sueltan bastante líquido.
  4. Pasado el tiempo, enjuaga los pepinos bajo el chorro de agua fría abundantemente (al menos 3 veces) para eliminar el exceso de sal.
  5. Escúrrelos muy bien, presionando ligeramente si es necesario para quitar toda el agua posible. Sécalos con papel de cocina.

3. La vinagreta asiática

Mientras los pepinos reposan o se escurren, puedes preparar el aliño.

  1. En un cuenco pequeño, mezcla la salsa de soja, el vinagre de arroz, el aceite de chile, el azúcar, el aceite de sésamo y el ajo picado.
  2. Remueve bien con una cucharilla o varillas pequeñas hasta que el azúcar se disuelva.
  3. Prueba y ajusta si lo ves necesario (más picante, más dulzor, más acidez...).
  4. Incorpora las semillas de sésamo tostadas y la cebolleta picada. Mezcla de nuevo.

4. Montaje final

¡El último paso!

  1. Coloca los pepinos bien escurridos en un bol o plato de servir.
  2. Vierte la vinagreta por encima.
  3. Con cuidado, usando dos cucharas o las manos limpias, mezcla bien para que todos los trozos de pepino se impregnen del aliño.
  4. Puedes servirla inmediatamente o dejarla reposar en la nevera unos 10-15 minutos para que los sabores se mezclen aún más (aunque perderá un punto de crujiente si reposa mucho).
  5. Decora con unas pocas semillas de sésamo extra y un poco más de cebolleta picada si lo deseas.

Consejos y sugerencias

  • Nivel de picante: El aceite de chile varía mucho en intensidad. Empieza con la cantidad mínima y añade más si te gusta bien picante. También puedes añadir unas escamas de chile seco.
  • Textura: Sírvela lo antes posible después de aliñarla para disfrutar de su máxima textura crujiente.
  • Variaciones: Puedes añadir un poco de jengibre fresco rallado a la vinagreta o incluso unos cacahuetes picados por encima para un toque extra crujiente.
  • Conservación: Aunque está mejor recién hecha, puedes guardarla en un recipiente hermético en la nevera durante 1 día.

¡Y listo! Ya tienes tu ensalada asiática de pepino picante preparada para disfrutar. Una explosión de sabor y frescura que seguro repetirás.