Cómo cocinar arroz Japonés perfecto (Gohan) en casa

Aprende la técnica infalible para preparar gohan o arroz japonés en casa. Consigue la textura perfecta para acompañar tus platos orientales favoritos.

Cómo cocinar arroz Japonés perfecto (Gohan) en casa

El arroz blanco cocido, conocido como gohan en Japón, es mucho más que una simple guarnición; es el corazón de innumerables platos y un elemento fundamental en la dieta japonesa. Conseguir esa textura ligeramente pegajosa y ese sabor sutil característicos requiere seguir unos pasos concretos. ¡Pero no te asustes! Con esta guía, preparar arroz japonés perfecto en casa es más sencillo de lo que parece.

Ingredientes necesarios

La clave está en la proporción y la calidad:

  • Arroz japonés: Utiliza una variedad de grano corto o medio, tipo japónica. La cantidad dependerá de cuántas personas seáis. Como referencia, unos 80-90 gramos de arroz crudo por persona suele ser adecuado. Para este ejemplo, usaremos 360 gramos.
  • Agua fría: La proporción es fundamental. Usaremos 1,2 partes de agua por cada parte de arroz. Para 360 g de arroz, necesitaremos aproximadamente 430-440 ml de agua.

Utensilios

  • Un bol grande para lavar el arroz.
  • Un colador fino.
  • Una olla o cacerola de fondo grueso con tapa que ajuste bien.

Preparación paso a paso del arroz Japonés

Sigue estos pasos meticulosamente para asegurar un resultado óptimo:

1. Lavado del arroz: Eliminar el almidón

Este paso es crucial para evitar que el arroz quede pastoso. Vierte el arroz seco en el bol. Cubre con agua fría y remueve suavemente con la mano. Verás que el agua se vuelve blanquecina debido al almidón superficial. Escurre el agua con cuidado (ayúdate del colador si es necesario) y repite el proceso. Lava el arroz unas 3-5 veces, o hasta que el agua salga prácticamente transparente. Ten cuidado de no romper los granos.

2. Remojo: Hidratación clave

Una vez lavado, escurre bien el arroz y déjalo en el colador o en el bol sin apenas agua durante unos 30 minutos. Este tiempo de remojo permite que los granos se hidraten de manera uniforme, lo que favorece una cocción perfecta y una textura ideal.

3. Cocción precisa en olla

Pasado el tiempo de remojo, escurre cualquier exceso de agua que pudiera quedar. Transfiere el arroz a la olla de fondo grueso. Añade la cantidad exacta de agua fría medida (la proporción 1 de arroz por 1,2 de agua). Distribuye el arroz de manera uniforme en el fondo de la olla, puedes aplanarlo suavemente con la mano.

Lleva la olla al fuego. Cocina a fuego alto destapado. En cuanto rompa a hervir vigorosamente, baja el fuego al mínimo posible, tapa la olla herméticamente y deja cocer durante 12 minutos. Es vital no levantar la tapa durante este tiempo para no romper el ciclo de vapor.

4. Reposo final: El toque maestro

Transcurridos los 12 minutos de cocción a fuego bajo, apaga el fuego por completo. Sin destapar la olla bajo ningún concepto, deja que el arroz repose durante 15 minutos más. Este reposo permite que los granos terminen de absorber la humedad restante y que la textura se asiente.

5. ¡Listo para servir!

Después del reposo, destapa la olla. Con una espátula o cuchara de arroz (shamoji), remueve suavemente el arroz desde el fondo hacia arriba con movimientos envolventes para separar los granos sin aplastarlos. Sírvelo caliente como acompañamiento de tus platos japoneses preferidos.

Consejos adicionales

  • Tipo de arroz: Insistimos en usar arroz japonés de grano corto (tipo Minori, Koshihikari, Akitakomachi...). Otras variedades como el basmati o el de grano largo no darán el mismo resultado pegajoso característico.
  • La tapa: No subestimes la importancia de no levantar la tapa durante la cocción y el reposo. La presión y el vapor son claves.
  • Fuego: Controla bien la potencia del fuego, especialmente al bajarlo al mínimo. Si tu fuego mínimo es muy potente, considera usar un difusor de calor.

¡Disfruta de tu auténtico arroz japonés casero!